Este fin de semana he estado esquiando en Andorra y de camino de vuelta hemos variado un poco el itinerario para no encontrar tráfico y hemos parado a dar una vuelta en Organyà a unos 160 kms de Barcelona.
En Organyà, en 1904, fueron encontrados los textos escritos en catalán más antiguos que se conocen y que datan de entre el siglo XI y el XII. Las Homilías fueron halladas en la rectoría de la iglesia del pueblo entre un montón de basura y se componían de un total de 16 páginas escritas en catalán con alguna influencia provenzal que contenían sermones sobre el Nuevo Testamento.
Actualmente se conservan en la Biblioteca de Catalunya y son accesibles a través de Internet aunque entender algo puede ser una auténtica odisea. De hecho, si dejamos a un lado la difícil letra gótica ya de por si el propio texto es bastante complejo. A continuación un ejemplo en catalán original:
«Seinor, nostre Seinor dix aquesta paraula per semblant, et el esposa per si el ex. Aquel qui ix seminar la sua sement, e dementre que semenava, la sua sement cadeg prob de la via e fo calzigad, e’ls ocels del ciel mengaren aquela sement: qtiesi seminador dix nostre Seinor que son los maestres de sent’eglesia, (la sement e) la predicacio de Iesu Crist. Los auzels del cel qui mengaren aquela son los diables qui tolen la paraula de Deu de coratge d’om per mal e peccatz e per males obres. Et aliut cecidit super petram el natum aruit, quia non habebat hurnorem. Aquela sement qui cadeg sobre la pedra fo seca per zo car no i avia humor, demostra la paraula de Deu qui cad el cor del om e ven diable e la tol del cor per zo qur no a humor de caritad en si. ..»
Y su traducción al español:
«Señores, Nuestro Señor dijo esta parábola por semejanza y la expone por sí mismo. Aquel que salió a sembrar su simiente, y mientras sembraba, su simiente caía junto al camino y fue pisada y los pájaros del cielo comieron aquella simiente: este sembrador dice Nuestro Señor que son los maestros de la Santa Iglesia, la simiente es la predicación de Jesucristo. Los pájaros del cielo que comieron aquélla son los diablos que quitan la palabra de Dios del corazón del hombre por males y pecados y por malas obras. Et aliud cecidit, etc…(Lucas VIII, 6). Aquella simiente que cayó sobre la piedra fue seca porque no había humor; demuestra (representa) la palabra de Dios que cae en el corazón del hombre y viene el diablo y la quita del corazón porque no tiene humor de caridad en sí…»