Rescaté hace unas semanas de la casa de mis abuelos en Gornal un viejo reloj de pared, en muy mal estado, con la madera entre podrida y carcomida y al que le faltaban muchas piezas, entre ellas la puerta de cristal.
Aprovechando los días de Navidad, me he dedicado a quitar la vieja pintura, eliminar la carcoma y pintarlo de color blanco tiza. El mecanismo, lo he desmontado, limpiado y aunque no lo he puesto en funcionamiento, creo que podría hacerlo porque solo me falta una pieza que une la parte superior y el péndulo. El resto parece que funcione bién.
Investigando un poco el mecanismo, he descubierto que es de la marca Junghans, creada en 1861 y que en 1903 se la consideraba la fábrica de relojes más grande del mundo.
Comparando las diferentes formas de su logo desde su creación, la utilizada en el mecanismo se correspondería al período entre 1890 y 1900 o sea que deduzco que el reloj debe ser de los primeros años del siglo XX, anterior a 1920.
En todo caso, una vez terminada la limpieza, ya descansa en una de las paredes de mi casa en Barcelona.