Durante mucho tiempo he estado intentando encontrar algún dispositivo que me permita almacenar y reproducir películas, música y fotos. La cosa parece fácil, ¿ no ?… pues no. El primer impulso es comprar alguno de los muchos modelos de discos duros multimedia que existen en el mercado pero estos tienen un grave problema y es que no disponen de interfaz de usuario independiente. Es decir, para escoger una canción, por ejemplo, necesitas encender el televisor y no puedes usar un mando a distancia para cambiar canciones sin tenerlo encendido.Otros de los requerimientos eran que dispusiera de una pantalla táctil fácil de usar desde donde se pudiera manejar la información guardada en carpetas, que a través de wifi se pudiese mapear el disco duro del dispositivo desde el ordenador y que se pudiera conectar de forma cómoda a un amplificador y televisor.
Después de muchos meses de búsqueda, lo encontré: Archos 705 WIFI (arriba) con la base de expansión DVR Station Gen 5 (abajo). En total 160 GB de tamaño y una pantalla de 7″ (800×400).
Pero ahí no terminaba todo. El siguiente paso era comprarlo y en Barcelona era una auténtica odisea. No estaba en ninguna tienda conocida y sólamente a través de Internet se podía encontrar en Pixmania (reproductor y base de esxpansión) y en FNAC (sólo reproductor). Los precios, por supuesto, altamente prohibitivos para ambos dispositivos. Por ejemplo, la base de expansión costaba con gastos de envío e IVA más de 120 €.Después de mucho buscar, he comprado el Archos 705 wifi en Alemania a través de Amazon UK (lo he recibido en 8 días) y la base de expansión en Irlanda a través de Priceminister (lo he recibido en 3 días). El precio final ha sido la mitad de lo que costaba en España.