En unas horas cumpliré 51 años y para la ocasión he recuperado esta vieja fotografía de mi tercer aniversario.
La fotografía tiene su gracia por lo muy costumbrista que resulta: la botella de CocaCola, absolutamente nada habitual en mi casa, una botella de vino «El Baturrico» y una cerveza Xibeca. Se me hace extraño ver la cerveza y el vino juntos en la mesa porque el único que bebía de vez en cuando era mi padre y no tengo claro a que se debía ese despliegue para una única persona.
El pastel también parece muy perfecto con su «Feliz Cumpleaños» plateado o dorado y es que tampoco era muy habitual que mi madre comprara pasteles ya que los hacía ella misma.
Todo ello me da que pensar que quizás teníamos invitados en la mesa aunque no recuerdo nunca haber celebrado mi cumpleaños con alguien más que mi madre, mi padre, mi hermano y, mientras vivía, mi abuela.