Lo que hay encima de mi

Aprovechando esta tarde de confinamiento en la que estaba colocando un foco en el comedor de casa, he aprovechado para meter mi teléfono con el flash activado por el agujero del techo y esto es lo que he grabado.

Entre el falso techo de escayola y el techo real hay un espacio de unos 15 centímetros, suficiente para poder pasar los tubos coarrugados que pasan por encima de las guías metálicas de las placas de pladur que aunque no lo parezcan, son bastante resistentes y aguantan mucho peso.

Este tipo de falso techo es habitual en las viviendas de nueva construcción y permiten la instalación de focos de forma sencilla así como extender cables sin tener que hacer regatas.

Nos Hemos Mudado

Pues finalmente y con más de 6 meses de retraso nos hemos mudado de casa y hemos abandonado el Poblenou para venirnos a Les Corts, en la ciudad de Barcelona, casi en el límite con Esplugues i Hospitalet.

El adiós al Poblenou no es definitivo porque trabajó en la zona y continuaré estando por ahí casi a diario.

Ya estoy en Barcelona

Ya hace 24 horas que he vuelto de Argentina. Después de dormir un poco, comer, ducharme y esas cosas ya estoy como nuevo pasando calor, viendo el mar desde casa (ver fotografía de abajo).

La vista desde la buhardilla de casa
La vista desde la buhardilla de casa

Este fin de semana voy a estar algo ocupado viendo algunas finales de atletismo (y la marathon),  configurando el Archos, posteando, entrenando, en alguna reunión familiar, poniendo en orden algunas fotografías e incluso trabajando un poco.

Pero lo mejor es que en 3 semanas me voy, por fin, de vacaciones.

Ya está: «No vendemos»

Después de más de un año y medio intentando vender nuestra casa de El Masnou, esta tarde, en reunión plenaria, hemos decidido que no vendemos y que no nos trasladamos a vivir a Barcelona ciudad.

Han influído en la decisión diversos factores entre los que destacan el bajo precio que nos ofrecía el mercado y lo difícil que iba ser cambiar más de 200 metros cuadrados con vistas al mar y parking por un ático de 100 metros con vistas a alguna calle aglomerada.

Así que no vamos a vender y a cambio procederemos a mejorar aun más nuestra calidad de vida poniendo una puerta automática en el parking, renovando la cocina, el baño de abajo, poniendo parket en el primer piso (que aun no teníamos) y revistiendo de teca el suelo y paredes del jardín de detrás.