El balance del 2022

El 2022 ha sido un año bueno, al menos mejor que el 2021 donde el covid nos fastidió un poco. Ahí va el balance del año que nos deja:

    • Por fin he podido comenzar a viajar un poco por ocio con mención especial para Sofía (Bulgaria) y Beirut (Líbano) con la espectacular visita a Byblos, la ciudad continuamente habitada más antigua del mundo.
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    • Me lo he pasado muy bien en las salidas aleatorias con Pol y Blanca para descubir lugares nuevos por la ciudad y fuera de ella así como restaurantes de todas las nacionalidades posibles.
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    • Después de suspender mi exámen práctico de moto A2, decidí que comenzaría con una 125 de marchas y así lo hice. Mi Fantic Caballero es una de las mejores compras que he hecho jamás en mi vida.
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    • También en 2022 me tiré por primera vez en paracaídas en la Costa Brava y un par de meses más tarde en parapente en los Pirineos Aragoneses.
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    • A nivel físico, aunque no estoy perfecto, me he recuperado bastante bien de mi rotura de ligamento cruzado anterior en 2021 y he corrido una maratón y una trail de 30kms con bastante desnivel.
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    • Por fin, después de mucho tiempo queriendo ir, descubrí el Puente perdido de Morillo en el Sobrarbe sobre el río Yesa, rodeado de exhuberante vegetación y del que bien poco se sabe.
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    • A nivel profesional, he tenido un cambio importante y a mediados del año pasado me hice cargo de una unidad de negocio en Sage y no solo de la parte de ingeniería de software como tradicionalmente había hecho en la última década.
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    • A nivel de activos he seguido comprando y vendiendo tímidamente algunos valores en bolsa, he continuado invirtiendo en algunas startups con especial énfasis en un par de ellas y para rematar me he comprado un piso.
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¿Como es un sábado perfecto?

El sábado, por defecto, es el mejor día de la semana por antonomasia. Y en mi caso, aun puede ser más perfecto si soy capaz de prepararme una buena comida en casa y echarme una siesta en la cama, con pijama y las persianas bajadas, de no menos de dos horas.

La comida presiesta es clave y tiene que hacerse en casa. No sirve en un restaurante porque nada está más bueno que lo que te has cocinado tu mismo.

Uno de mis menús preferidos es pasta con rovellones, rosinyols, galeras e hígado de bacalao. La pasta tiene que ser fusilli, radiatori o casarecce porque su textura es más gruesa y además el sabor se impregna mucho más que en los clásicos macarrones o espaguetis.

Las setas (rovellones y rosinyols) tienen que ser frescas y no tienen que cocerse demasiado. Lo mismo aplica a las galeras. En la salsa puedes ponerle un poco de tomate pero sin excesos. Obviamente, ni queso y mucho menos nata. El perejil y la pimienta negra le darán un toque final excepcional al plato con la pasta al dente donde la estrella es el hígado fresco de bacalao que puedes comprar en cualquier pescadería y tiene que estar cortado en dados no muy pequeños (un centímetro).

Quizás con un poco de vino y agua, y directo a la cama a hacer la siesta.

Fantic Caballero Scrambler 125

En pleno proceso para sacarme el carnet A2 para poder conducir motos de hasta 48 CV (unos 500cc aproximadamente), me entraron las prisas y después de suspender mi primer intento del exámen práctico decidí comprarme una moto de marchas para ir prácticando.

Después de un análisis exhaustivo me hice con una Fantic Caballero Scrambler 125 por varios motivos:

      • Es una moto muy polivalente que tanto funciona bien en la ciudad como por caminos y en el monte.
      • Es una de las menos pesadas del mercado por lo que es muy fácil manejarla.
      • Su motor Minarelli 125 4T Euro5 es muy eficiente y entrega una combinación equilbrada entre par y potencia.
      • Dispone de embrague anti-rebote.
      • Fántic es una marca emblemática italiana no demasiado conocida por aquí pero con una tradición importante en el mundo offroad.
      • La Caballero Scrambler me parece una moto muy bonita.

Como extras le cambié el color del depósito y lo puse negro (el original era rojo).

Las primeras impresiones después de 3 meses conduciéndola y algo más de 1.100 kms son excelentes: es una moto muy ligera, potente y lo más sorprendente es que es mucho más ágil y segura que la scooter que he conducido durante los últimos años para moverme por la ciudad.

Una vez que dominas las marchas, la moto es mucho más ligera que una scooter y además gira más y como que es más alta tienes una mejor visión del tráfico.

AGL-4, Templarios

El 18 de Febrero de 1995 terminé el servicio militar obligatorio. Estaba destinado en Lleida en el Cuartel de Templarios junto al Castell de Gardeny, en la Agrupación Logística número 4 (AGL4). Mi pase por la mili fue bastante tranquilo y reconfortante: conocí gente interesante, leí muchos libros y tuve tiempo de entrenarme para el que aun sigue siendo mi record vigente de Maratón que hice en San Sebastián ese año con 3h20′.

Como despedida y como recuerdo de los 9 meses que pasamos juntos, alguien se dedicó a hacer este interesante mural del cual hicimos una copia para cada uno y que hoy he encontrado en un cajón.

¿Qué moto me compro?

A mis 50 he decidido sacarme el carnet de moto A2 (48CV máximo) y una vez lo tenga, que ya queda poco, me compraré una. Y aquí es donde comienzan las dudas.

La principal es si quiero una scrambler o una adventure. La scrambler es más cómoda por ciudad mientras que la adventure es más cómoda para distancias largas. En ambos casos, quiero que tengan algo de offroad aunque no tenga ni idea de como conducir por el monte ni quiera hacer ninguna ruta seria (de momento).

Lo cierto es que el 80% del tiempo la utilizaré en ciudad y rondas y que esporádicamente puedo querer ir al Pirineo o a pasear fuera de la ciudad. Estéticamente, las scramblers son más bonitas porque las clásicas del adventure, las BMW 1200GS y toda su familia, me parecen tanques conducidos por abuelos.

Comparativa de modelos

He hecho una pequeña comparativa de los modelos que más me llaman la atención, descartando algunas marcas y modelos que no me atraen nada como las Benelli, CF Moto, Voge o Brixton. Otras clásicas como Yamaha, Kawasaki o Suzuki no tienen gran cosa.

Aunque prácticamente cambio de opinión a diario, los tres modelos que quedan en mi lista final son la Fantic Caballero 500, la Macbor Eight Mile 500 SCR y la Macbor Montana XR5.

Mi Tercer Cumpleaños

En unas horas cumpliré 51 años y para la ocasión he recuperado esta vieja fotografía de mi tercer aniversario.

La fotografía tiene su gracia por lo muy costumbrista que resulta: la botella de CocaCola, absolutamente nada habitual en mi casa, una botella de vino «El Baturrico» y una cerveza Xibeca. Se me hace extraño ver la cerveza y el vino juntos en la mesa porque el único que bebía de vez en cuando era mi padre y no tengo claro a que se debía ese despliegue para una única persona.

El pastel también parece muy perfecto con su «Feliz Cumpleaños» plateado o dorado y es que tampoco era muy habitual que mi madre comprara pasteles ya que los hacía ella misma.

Todo ello me da que pensar que quizás teníamos invitados en la mesa aunque no recuerdo nunca haber celebrado mi cumpleaños con alguien más que mi madre, mi padre, mi hermano y, mientras vivía, mi abuela.

El Balance del 2021

El 2021 está ya casi terminando y este es mi particular balance del año:

      • Pol ha comenzado el colegio y Blanca se ha puesto a andar y ya dice sus primeras palabras: pete (chupete), papa, caca, te, esto, no, nas, llet,…
      • En marzo me rompí el ligamento cruzado posterior de la pierna izquierda y he estado parado 6 meses pero ya estoy casi recuperado del todo.
      • A falta de poder correr, he estado nadando un poco y en septiembre competí en la Marnatón de Cadaqués de 2,5 kms.
      • Después de más de un año y medio sin coger un avión, justo después del verano he vuelto a volar por trabajo para ir a Inglaterra cuatro veces.
      • Finalmente he conseguido vender la antigua casa de mis padres y mi casa del Poblenou con lo que ya solo tengo una hipoteca.
      • He decidido que me voy a sacar el carnet de moto A2 y en octubre aprobé ya el exámen de teórica. Ahora tengo que pensar en la moto que me compraré.
      • He tenido algunos fines de semana de amigos realmente «trepidantes»: boda de Álvaro en Valencia, su despedida, setas en el Sobrarbe, reunión anual de los compañeros de la universidad en Puigcerdà,…
      • A nivel profesional, pocos cambios: contínuo como vicepresidente mundial de ingeniería de software para el segmento de pequeñas empresas con un equipo que ha crecido hasta las 700 personas y con el que continuo aprendiendo día tras día.
      • Finalmente después de 30 años, he comenzado y terminado de ordenar las colecciones de sellos de mis padres y mías. Las he clasificado por países alfabéticamente y con un álbum especial para los sellos de España ordenados por año y tipo de régimen.
      • He leído 6 libros y voy camino del séptimo.

Si me acuerdo de algo más, ya lo añadiré.

Coleccionando Sellos

Cada año intento hacer algo en memoria de mis padres, y en 2021, aprovechando mi lesión de rodilla y que no podía moverme mucho, me he dedicado a ordenar los miles de sellos que tenían metidos en cajas y que estuvieron recopilando durante 2 o 3 generaciones.

El tema no me ha venido de nuevo ya que cuando era pequeño coleccionaba sellos españoles, a partir de diciembre de 1975 cuando comenzó el reinado de Juan Carlos I, y algunos domingos mi padre solía llevarme a la Plaza Real o al Mercat de Sant Antoni a comprar los sellos que me faltaban para mis álbumes.

La tarea ha sido larga y me ha llevado unos 5 meses invirtiendo cada noche entre una y dos horas. Al final me han salido 3 álbumes grandes de 60 páginas: uno para los sellos de España y colonias hasta 1976 y dos para el resto de países.

Primera página del álbum de sellos españoles

La verdad es que es apasionante seguir la historia de los paises a través de sus sellos, descubrir paises que ya dejaron de existir, cambios de nombre, colonias y diferentes formas de gobierno como por ejemplo la Segunda República Española cuando el rey Alfonso XIII tuvo que exiliarse en 1931 para ya no volver nunca más.