Pol empieza a despuntar ya también en el mundo del arte. El otro día decidió dar sus primeros pasos en la pintura y realizó esta obra maestra, óleo sobre lienzo, que enfatiza la fuerza vital que nos impulsa a sobrevivir y crecer.
Los gruesos trazos definidos reflejan la energía inherente en las cosas y en nosotros mismos y como su choque contra las barreras naturales generan una explosión de energía expresada en forma de manos rojas y azules.
Es esta representación casi monumental de la mano izquierda la que cobra mayor significancia en el lienzo y su elevación virtual impacta visualmente con el resto de colores para reclamar el derecho a estar, a existir, y para realzar esa conexión con los trazos verdes superiores que enfatizan el fluir de la energía en nosotros, y sobre como se regeneran en ese mar de indefinición para finalmente volver a florecer con fuerza.
Finalmente, llegó el momento de renovar el tejado de la casa de Turch, nuestra tortuga, que vive desterrada en nuestra terraza y que precisa de iluminación artificial ultravioleta (simulando el sol) y mantener una temperatura estable por encima de 22 grados para que no se nos congele.
Con una sierra de calar, he serrado un trozo de madera con el tamaño de su terrario y le he hecho dos agujeros, uno para la bombilla de calor y el otro para los ultravioletas. Por debajo de la tapa he puesto un medidor de temperatura WIFI para saber en todo momento como va el calorcito dentro de su casa.
Las dos bombillas están conectadas a enchufes WIFI y controladas a través de Alexa. La luz ultravioleta se enciende al amanecer y se apaga al anochecer automáticamente gracias a las «Rutinas» del asistente de Amazon.
Además, con una bisagra, he hecho una especie de tapa con su tirador para poder abrir fácilmente al terrario cada día para ponerle la comida (hojas de lechuga variadas).
El resultado es bastante bueno y la temperatura se ha incrementado en unos 6-8 grados de media. Turch parece estar bastante satisfecha.
El título, para ser preciso, debería ser algo así como «Comandos y scripts básicos para Bitnami si utilizas Lightsail en Amazon Web Services cuando instalas blueprints , por ejemplo, de WordPress o Magento» pero obviamente era muy largo. Sin embargo, y en términos generales, estos scripts también funcionarán fuera de AWS para otros proveedores de hosting que utilicen Bitnami.
Yo diría que los 3 comandos que tenemos que tener más a mano cuando realizamos la instalación de una de sus más de 130 aplicaciones que tienen en catálogo son los siguientes:
Cuando registras dominios con AWS y quieres vincularlos a instancias de EC2 o Lightsail, tienes que crear «Hosted Zones» utilizando Route 53. Una Hosted Zone tiene diferentes «Record Sets» y hay que ser cuidadoso para crearlos bien, especialmente en lo referente a los prefijos «www.» u otros.
En mi caso, estos son los Record Sets que tengo creados:
Una mala configuración puede hacer que nuestra web funcione mal e incluso que deje de funcionar si instalamos un certificado SSL y redirigimos tráfico de «www.» al dominio simple.
No hace falta decir que la IP, en mi caso la 3.127.33.7, tiene que ser fija.
Hace unos días monté en el techo de mi comedor un foco de luz que se alimenta de la lámpara principal y que se enciende y apaga utilizando un mando a distancia y el interruptor inalámbrico YAM YM-101 que me ha costado unos 8€ en Amazon y que viene con ese mando.
El montaje es muy sencillo: uno de los cables negros y el azul se tienen que conectar al foco mientras que el otro negro y el rojo a los dos polos de corriente de 220V o en mi caso a los dos cables de la otra lámpara. El cable blanco funciona como antena y no se tiene que conectar.
Aunque aun no he conseguido entender porqué el mando a distancia tiene tantos botones, el encendido y apagado funciona perfectamente con dos de ellos y el único aspecto mejorable es que cuando recibe electricidad, su estado inicial es encendido y no apagado. Es decir, cuando enciendo la lámpara principal, el foco también se enciende y tengo que apagarlo con el mando si no lo quiero mantener encendido.
Una recomendación importante es que no intentes seguir las instrucciones que aparecen impresas en el YM-101 porque he sido incapaz de entender el inglés en que está escrito todo y que lo he releído bastantes veces. Si alguien es capaz de descifrarlo, quizás arroje luz sobre el funcionamiento de todos los botones del mando.
Aprovechando esta tarde de confinamiento en la que estaba colocando un foco en el comedor de casa, he aprovechado para meter mi teléfono con el flash activado por el agujero del techo y esto es lo que he grabado.
Entre el falso techo de escayola y el techo real hay un espacio de unos 15 centímetros, suficiente para poder pasar los tubos coarrugados que pasan por encima de las guías metálicas de las placas de pladur que aunque no lo parezcan, son bastante resistentes y aguantan mucho peso.
Este tipo de falso techo es habitual en las viviendas de nueva construcción y permiten la instalación de focos de forma sencilla así como extender cables sin tener que hacer regatas.
Desde hace algo más 2 años estoy gestionando las cacas de mis hijos, Pol (2 años) y Blanca (1 mes), y durante este tiempo he probado tres diferentes tipos de papeleras para sus pañales hasta que he encontrado la mejor de todas y de la que estoy más contento. Estas son las opciones que he probado:
Sangenic Tec de Tommee Tippee. Es el peor de todos por varias razones: es caro, necesitas recambios de bolsas especiales también muy caras (3 recambios, 30 euros), se llena enseguida y lo peor de todo es que después de cada cambio de pañal tienes que emplear como 20 segundos dando vueltas al contenedor de cacas para cerrar el pañal. Además, el sistema de cierre y empuje del pañal hacia adentro es muy poco higiénico y siempre está sucio. Es cierto, que si lo haces bien elimina parte de los olores pero no he notado mucha diferencia con el resto de sistemas. Aun lo tengo junto con una recarga de bolsas por lo que si alguien lo quiere, se lo regalo.
Cesto Önsklig de Ikea. Es el complemento ideal para el cambiador de Ikea que es muy cómodo. Se cuelga en uno de sus lados y es realmente rápido el abrir la tapa y poner los pañales usados. Pese a que es muy barato (8€ el cesto más sus complementos), el problema es que es muy pequeño y hay que cambiar la bolsa cada poco tiempo. Además, cuando está lleno, no se puede apretar porque se cae. Sin embargo, lo he utilizado durante más de un año a pleno rendimiento.
Cubo de basura Mjösa de Ikea. Este es mi favorito. Aunque es un poco caro, 35€, tiene una capacidad de 30 litros por lo que aguanta bastantes días sin tener que vaciarlo. Además, funciona bien con las bolsas de asas de supermercado que son más resistentes y de mejor manejo para tirarlas que las bolsas tradicionales de basura. Es elegante y se abre pisando con el pie por lo que es también muy rápido. Tiene en la base una goma que evita que se deslice por el suelo. En definitiva, tiene todo lo que uno pudiera imaginar para que tirar las cacas de tu hijo sea una experiencia agradable.
El resumen es que es mejor utilizar métodos tradicionales y que lo más rápido es cerrar bien el pañal antes de echarlo en cualquier papelera y utilizar recipientes grandes para no tener que vaciarlos cada día.